La fábrica de secretos: Pequeñas historias por correo

(Cerrado el cupo de participantes, ¡¡lo siento!!)

Hoy es el último día del año, espero que aprovechéis las últimas horas que quedan del 2013. Yo sin embargo, lo que os traigo es un plan para el 2014. ¡Espero que os guste!

Os presento “Pequeñas historias por correo”. Vale, no tiene nada que ver con el mundillo craft (¿o si?), pero me parece algo muy interesante. ¡Ahora os lo cuento!

Hace tiempo que se ha perdido la costumbre de escribir cartas, y muchísimo más, a mano. Con lo bonito que es abrir el buzón, y ver que entre toda esa publicidad de tiendas y las cartas del banco tienes una carta de alguien que se ha acordado de ti…

Pues en parte, de eso va esto. Más o menos. Se trataría de que cada mes, entre cinco personas, se escriba una historia, pero… ¿Cómo? Es una historia en cadena. Alguien empezaría la historia (un folio aproximadamente de extensión), le mandaría la carta a la siguiente, que deberá de continuarla con otro folio, y así hasta acabar la cadena de cinco. La última me lo volvería a mandar a mí con el final del relato.

Además de la hoja correspondiente al relato, siempre podéis añadir otras cosas para la siguiente persona a la que le toca, no sé… alguna ilustración, foto, postal, flores u hojas secas, pegatinas, bolsitas de té… Vamos, que eso ya lo dejo de vuestra mano, confío en todos vosotros.

En la fecha señalada del siguiente mes, yo colgaría aquí en el blog el relato en PDF para que os lo podáis descargar y leer todos lo que ha salido de ahí. Y si el experimento ha ido bien, y os ha gustado, pues se repetirá en el siguiente mes, con otras cinco personas e historias diferentes.

Con la creatividad que se respira en todos los blogs, instagrams, etc… ¡Fijo que pueden salir cosas de aquí estupendas! ¿Qué os parece? ¿Os gusta la idea? ¿Voluntarios? Si estáis interesados, sólo tenéis que mandarme un mail a fabricadesecretos@gmail.com poniendo como asunto “Pequeñas historias por correo”.

Pensadlo: abrir el buzon, ver la carta de "pequeñas historias", y sentarse tranquilamente en el sofá, o en la cama, con una tacita de café, o té, musiquilla adecuada, abrirla, ver todo lo que hay dentro y ¡a leer! Y luego, a contestar, darle una continuación a la historia, ¡será también tu historia!